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Esteban París

Su historia

Esteban París tiene una historia que  a Jean-Max Estéban le encantaba contar la de cómo la empresa que lleva su nombre comenzó con un amor a primera vista: el de un aficionado a la aviación y explorador de corazón con una joven artista amante de los perfumes.

Para conquistarla, diseñó tótems delicadamente decorados que perfumó hasta la médula con notas preciosas. Su deseo: compartir con ella sus emociones y mostrarle la poesía infinita del mundo visto desde arriba.

Tras un viaje a África, crearon Teck & Tonka: una colección amaderada-especiada impregnada de arte africano, que evocaba caminos de tierra roja y casas de madera impregnadas de especias.

El resto de su historia está marcada por una serie de encuentros y amistades. La amiga y estilista Primrose Bordier, la reina del color, embelleció rápidamente las colecciones iniciales y las convenció de ampliar sus creaciones.

Sus productos

Esteban París, colección tras colección, accesorio tras accesorio, reinventó el arte de la perfumería y siguió extendiendo sus alas. Sus complementos, perfumes impregnados de poesía, siguieron cautivando la vista tanto como los sentidos.

Desde hace más de 35 años se dan y reciben con emoción, contando una historia y creando conexiones.

Esteban París, sigue creando continuamente perfumes irresistibles que son amigos, cómplices a los que nos apegamos porque embellecen nuestra vida y nuestro hogar.

Bouquets perfumados, velas con fragancias recargables, difusores de aromas, ambientadores de calidad, inciensos, concentrados de perfumes, son algunos de su amplio catalogo de referencias para el perfumado de interior.